El secreto para cultivar conexiones profesionales con un mínimo de ansiedad y torpeza
Hay dos cosas particulares que la mayoría de nosotros odiamos por tener que hacer redes de contactos. Uno es su naturaleza puramente transaccional. En un artículo del Harvard Business Review, se ofreció esta definición irónica de networking: "la desagradable tarea de comerciar favores con extraños". La otra es que la necesidad de hacerlo se siente como una vulnerabilidad. Llegar a pedir a alguien, para ponerlo de buenos términos, a un gerente de contratación, o conseguir una pista sobre una nueva oportunidad, puede hacer que se sienta desesperado (¿no deberías ser capaz de hacer esto por su cuenta?).
Tener que ponerse en las manos de un extraño o de un casi extraño para obtener ayuda es estresante, también. Añade a esto, a que cualquier tipo de presión de tiempo, por ejemplo, si de repente has perdido tu trabajo o estás en medio de trastornos familiares — y es probable que se sienta mal por sí mismo en un momento en el que necesita aparentar estar en pie sólido. Eso puede hacer que sea doblemente difícil y doloroso ponerse ahí fuera.
Aquí hay un pequeño secreto: en algún momento, cada uno de nosotros tendrá que pedir ayuda a alguien más. Tal vez sea para un trabajo o un Consejo familiar; podría tratarse de un pivote o reubicación profesional; podría ser para la dirección médica o de jubilación. Usted, y todos los demás, tendrá que llegar a una serie de personas para contactos, información, asesoría o apoyo. Presumiblemente, usted está feliz de prestar una mano amistosa (o oreja) a otras personas. Ahora es el momento de ponerse bien con la búsqueda de ayuda para usted mismo, esa es la clave para hacer trabajo en red.
La clave para superar sus temores acerca de las redes es practicar un poco cada día, y hacerlo cuando no necesite ayuda específica. Yo lo llamo "manteniéndonos en contacto-flojo": surgen de vez en cuando a sus conexiones y conocidos (viejos y nuevos), sin ninguna obligación de seguir o verse en persona. Si haces esto cuando No estás sintiéndose necesitado, usted comenzará a verse a sí mismo como un dador, no como un tomador. Y si usted puede resolver ocasionalmente problemas para otros como resultado de estos check-ins, le ayudará a superar su miedo de sentirse necesitado.
Mi principio rector para facilitar el trabajo en red es el siguiente: nutrirlo antes de que lo necesites. En su libro Amigo de un amigo, el profesor de la escuela de negocio David Burkus (TED Talk: Por qué usted debe saber cuánto le pagan a sus compañeros de trabajo) se basa en la idea de que la gente que ya conoce, pero los que son nuestros contactos más lejanos, o nuestros "lazos débiles" — son los que mejor se adaptan para ayudarle. El autor observa, "Cuando tenemos un revés de la carrera... tendemos solamente a decir a un círculo cercano de amigos que pueden o no pueden ser capaces de ayudar. ... En cambio, deberíamos ir a nuestros lazos débiles e inactivos, contarles nuestra historia, y ver qué oportunidades tienen. Aún mejor, deberíamos empezar una práctica regular de volver a enganchar con nuestros lazos débiles y latentes ". De eso se trata mantener el contacto-flojo.
Los momentos de "contacto-flojo" sirven como tejido conectivo y un marcador de su relación continua.
Hace mucho tiempo, mi hábito de contacto-flojo consistía en una lista en un post-it de las llamadas telefónicas que haría cada día pegado a la cubierta de una libreta de direcciones bien gastada. Si me perdí a alguien, que iría en el siguiente día post-it Lista. Avance rápido hasta el siglo XXI y gran parte de nuestra comunicación se lleva a cabo a través de mensajes de texto, mensajería directa y correo electrónico. Ninguno de estos requiere una llamada telefónica, por lo que no tiene que preocuparse por interrumpir a nadie, porque la gente puede responder a usted cuando son libres. También es perfecto para los introvertidos; Usted puede tomar el tiempo para componer mensajes reflexivos, y usted no es tan en el lugar para una respuesta perfecta.
El efecto del contacto-flojo es ponerlo a usted en la conciencia de alguien por unos minutos, y viceversa. Estos momentos sirven como tejido conectivo ("tenemos esto en común") y un marcador de su relación en curso. Al cultivar conexiones sueltas, sepa que su red no aparecerá de una sola vez; requiere un trabajo constante y continuo. Es como me mantengo en contacto con docenas de personas. Compartiré chismes vistos en Twitter u otras noticias de interés mutuo. Por "Share", les envío un breve saludo y un enlace a algo para leer o ver. Si usted es un asiduo en LinkedIn, usted puede guardar en contacto-flojo con los contactos vía mensajes privados en esa plataforma. O puedes usar mensajes directos de Facebook o mensajería privada en Instagram, sólo depende de los servicios que uses y de los que usen tus contactos.
El contacto-flojo es cómo me mantengo al tanto de una diáspora de amigos que hice durante mi década en Google. Muchos de ellos han pasado a trabajar en muchas otras empresas. Enviamos alrededor de noticias divertidas o peculiares sobre nuestro viejo empleador o uno de sus competidores. Hay momentos en los que envío un enlace de noticias acompañado sólo por algun icono o mensaje tipo ¯ \ _ (ツ) _/¯ (un encogimiento de hombros), y no es raro que acaba de recuperar una :-) a cambio. ¡Voila! Es un momento flojo.
Los intereses compartidos son tierra fértil para el contacto-flojo, incluso con contactos profesionales. Por ejemplo, mi amiga Erika es una amante de los perros y una ferviente promotora de la buena experiencia del cliente. A menudo nos enviamos unos a otros GIFs de perros, o tenemos una risa virtual sobre el más reciente mal manejo corporativo de los clientes. A veces lo hacemos a través de mensajes de Twitter o en un grupo privado que compartimos en exceso. Ocasionalmente entremezclados con nuestros mensajes sobre perros y percances corporativos, uno de nosotros pasará a lo largo de una invitación de taller o una pista para el trabajo de consultoría.
El contacto-flojo puede conducir a una conversación en persona inmediata, pero puede no hasta mucho más adelante (o en absoluto). Hace años, conocí a un joven empleado de relaciones públicas en una startup; La llamaré Jenny. Su jefe, que había sido un colega conmigo en Google, trajo Jenny para reunirse y hablar conmigo acerca de cómo desarrollar un blog de la empresa. A medida que cambiamos de trabajo y comerciamos tweets o notas amistosas en los próximos años, Jenny y yo nos mantuvimos en (muy) contacto-flojo pero nunca nos hemos sentado cara a cara desde la primera reunión. Avance rápido, y hoy es socia de una empresa de capital riesgo. El año pasado, ella introdujo una de las empresas de su empresa a mí con la esperanza de que pudiera ayudarles con la estrategia de contenido. Yo estaba agradecido y tomó en su proyecto. Le he dicho a Jenny que me gustaría darle las gracias por la recomendación con una bebida o comida — pero incluso si no lo hacemos, nuestro contacto-flojo sigue siendo fuerte.
Todo el punto de contacto-flojo es que no es una carga. Cuantas más obligaciones acabes, menos probabilidades tienes de mantenerte al tanto.
Sólo pasar 10 minutos al día en contacto-flojo puede mantenerte conectado con un montón de gente. Esta pequeña cantidad de esfuerzo puede tener una rentabilidad mucho mayor, en buenos sentimientos si no en resultados eventuales. Normalmente lo hago por las mañanas porque mi ritual de pre-trabajo de revisar el correo electrónico y mis feeds de noticias es cómo me detengo para el día. Al escanear los titulares, compartiré una o dos historias que sé que son de interés para las personas que conozco, junto con una breve nota: "esto me hizo pensar en ti. ¿En que estás? Y ¿Cómo estás? "
Hay una desventaja importante del contacto-flojo: una proliferación de invitaciones, de preguntas y de fechas del café que usted no desea. Todo el punto de tacto flojo es que no es una carga. Cuantas más obligaciones acabes, menos probabilidades tienes de mantener las cosas flojas, o incluso de mantenerte al tanto. Si, en respuesta a una nota "me acorde de ti", recibes una invitación para reunirse a las 2PM el próximo jueves para tomar un café con alguien que no conoces bien, estás dentro de tus derechos para posponerlo. Puede retrasarlo hasta que quiera reunirse, o puede retrasarlo para siempre. He tenido leves conocidos llegar, ansiosos de unirse a Google, y me piden que reunirse para el café para hablar de trabajar allí. Por mucho que me gustaría ser útil, 30.000 más personas se han unido a la empresa desde que me fui. Mi información no es esa corriente. En su lugar, confío en un límite: voy a enviar un correo electrónico con un par de párrafos con mis impresiones generales, tal vez incluyen un artículo reciente que es relevante, y firmar con "buena suerte" genuina.
Julie es una empresaria en serie y maestra de la conexión que conozco, y ella también es una profesional en contacto-flojo. Ella cree que una razón por la que lo hace tan fácilmente es debido a la red de mujeres que conoció en su primer trabajo de periodismo "real", que era en el momento Inc. "era un ambiente colegial tan grande, no competitivo como otros medios de comunicación. Todos nos ayudamos mutuamente ", dice. "Todavía dependo de ellos. Cuando me pregunto cómo hacer frente a este nuevo desafío de negocios, puedo llamar o enviar un correo electrónico a una docena de mujeres para preguntar: "¿te gusta esta idea? ¿Cómo debo seguir adelante? Es usualmente Comentarios Estoy buscando, pero a menudo me quieren presentar a otros amigos o contactos que podrían ser capaces de ayudarme a alcanzar mi meta. Las otras mujeres hacen lo mismo cuando tienen problemas que resolver".
Al describir su círculo, Julie toca los principios principales del contacto-flojo: lo haces intermitentemente, no constantemente, y hay una calidad no forzada que funciona para todos. Cuando le pregunté qué la impulsa a no sólo conectar pero mantenerse en contacto con el tiempo, Julie dijo, "se remonta a lo básico de ser una buena persona, siendo un buen vecino. Usted siempre debe estar buscando a sus amigos y ex colegas y vecinos. Si eres una buena persona, siempre estás dispuesta a ayudarles, y entonces es fácil recibir o pedir ayuda después."
Articulo original Extraído del libro *"Taking the Work Out of Networking: An Introvert's Guide to Making Connections That Count". por Karen Wickre. Todos los derechos reservados.*
ACERCA DEL AUTOR
Karen Wickre es ex director editorial de Twitter, donde aterrizó después de una década de carrera en Google. Asesora de startups y buscador de información de por vida, es miembro de la Junta de visitantes de las becas de periodismo John S. Knight en la Universidad de Stanford y sirve en las juntas del centro internacional para periodistas, el proyecto de alfabetización noticiosa y el centro de las Artes Yerba Buena. Ha sido una columnista destacado de Wired.com y es una cofundada de Newsgeist, una conferencia anual de recolección que fomenta nuevos enfoques de noticias e información.